46 años después del nacimiento del Frente Estudiantil Revolucionario 29 de Noviembre FER-29 y de resistir y vencer oscuros días de represión, desapariciones y asesinatos a los líderes juveniles populares por parte de las dictaduras militares y civiles en Panamá, había llegado la hora de sumarnos por primera vez a un instrumento político-electoral para la Revolución panameña: el Frente Amplio por la Democracia FAD, que aglutina los sectores sociales más combativos de la Republica junto a los liderazgos forjados al calor de las luchas en defensa de los intereses económicos y sociales de los panameños.
El movimiento estudiantil en su devenir histórico, ha decaído en el atomismo y la infiltración de intereses partidarios de la oligarquía y sus instrumentos de dominación y represión en el seno de sus respectivas organizaciones juveniles.
Las teorías y las acciones de los revolucionarios panameños deben pasar siempre por la reflexión y la autocrítica. Como organización estudiantil nos hemos destacado en la crítica y la denuncia de sectores estudiantiles rendidos al gustavismo, quienes bajo la excusa del tactismo político, han desvirtuado el norte revolucionario de las juventudes con conciencia social y pensamiento crítico. Parece que fue ayer cuando las diversas organizaciones estudiantiles de la Universidad de Panamá hacíamos el llamado a no caer en el juego electorero de la Mafiocracia y la narco-política y sus procesos burgueses en las elecciones de 2009. Hoy, ha perdido el pueblo una importante oportunidad de hacer la diferencia, reeligiendo en el poder los mismos sectores de poder económico que tanto daño le han hecho a nuestro pueblo.
Esta nueva generación de líderes marxista-leninistas han asumido el relevo y el compromiso de sostener la organización estudiantil más antigua y combativa de nuestro país, y nace una nueva esperanza para toda la juventud.
Con nuestros propios esfuerzos y sacrificios a 48 años de lucha por la Patria y la Revolución, el Frente Estudiantil Revolucionario 29 de Noviembre FER-29 se mantiene y dice PRESENTE contribuyendo con activa militancia a la construcción de Poder Popular. Más allá del idealismo y el voluntarismo, nuestra organización se ha sumado a las tareas concretas de organización de los jóvenes panameños, como ha sido la refundación de laFederación de Estudiantes de la Universidad de Panamá FEUP, la conformación de la Brigada Universitaria Jorge A. Camacho, la continua participación de las luchas populares contra el régimen neoliberal de los oligarcas de turno junto a FRENADESO, la unidad de amplios sectores en la estructuración de la primera plataforma de convergencia juvenil llamado Nuestra Voz Üai-Nagwana que hoy impulsa la primera Ley de Juventud de Panamá junto a organizaciones sociales de todo el país y hasta lo que es hoy, las dignas postulación de importantes dirigentes estudiantiles surgidos de la militancia revolucionaria, en cargos que iban desde diputados y representantes en corregimientos hasta alcaldes y diputados al PARLACEN para asíadecentar la política panameña.
La convicción del movimiento estudiantil panameño marcó los objetivos históricos, desde el nacimiento del FER-29 el 5 de mayo de 1966, para destronar a la partidocracia reinante y corrupta con la organización, la movilización popular, la concienciación ante los problemas que nos aquejan y unirnos en la construcción de PODER POPULAR junto al movimiento sindical, indígena y gremial, para hacerle frente a la arremetida del capitalismo y la burguesía criolla en el trinomio oligarca-imperialista-militarista y su hegemonía impune en nuestro país.
La lealtad a los principios y la memoria de aquellos primeros jóvenes patriotas que se organizaron, forjados al calor de los acontecimientos de la represión militar del 9 de enero de 1964, hoy tiene sus frutos: años de lucha social por la liberación de nuestro pueblo nos llevó a candidatizar al Primer Obrero hacia un cargo de presidente. Del compromiso y ejemplo combativo bajo una una incorruptible moral revolucionaria.
Luego de manifestar nuestro histórico compromiso de liberación a 24 años de la Invasión militar Yankee en Panamá y a 50 años de la gesta heroica de los mártires del 9 de enero de 1964, estamos más que convencidos que Panamá aún NO ES LIBRE, NO ES SOBERANA Y NO ES INDEPENDIENTE, y que el sueño libertario de nuestros mártires aún está por concretarse. Hacia allá continuamos unificando esfuerzos.
Asumimos con firme compromiso nuestro papel en la Coordinación Nacional de la Juventud del Frente Amplio por la Democracia, y aquella importante experiencia nos inspira a seguir sumando a todos los jóvenes independientes y honestos de todos los rincones de nuestra Patria. Incluso históricas rivalidades en el seno del movimiento estudiantil menguaron.
Cumpliendo más de 4 décadas de incesantes luchas es imprescindible priorizar con madurez política, la urgente necesidad de UNIDAD de las fuerzas progresistas de la nación.
Nos llena de orgullo que importantes líderes populares hayan forjado su trayectoria en las luchas del movimiento estudiantil. Para nosotros es un gran orgullo, pero también sentimos un enorme respeto por la consecuencia de nuestros militantes, actuales y pasados, en esta nueva faceta de la lucha popular que nos avecina. Estamos hablando de hacer Revolución en el terreno de la burguesía: sometidos a sus leyes, a sus reglas antidemocráticas, en un país que carece de garantías políticas para quienes desde la izquierda revolucionaria estamos construyendo un nuevo frente de lucha y abogamos por un Panamá con equidad, justicia social y democracia participativa.
Debemos continuar nuestro trabajo de agitación y concienciación popular pero también la juventud panameña requiere del movimiento popular mayor solidaridad con las movilizaciones, luchas y la organización de los estudiantes en el movimiento estudiantil. No pueden cesar las acciones de la juventud y los estudiantes rebeldes, y debemos ahora más que nunca, profundizar la organización de la juventud en los colegios secundarios y en diversas universidades. Para esto, debemos ir trabajando en una coordinación conjunta revolucionaria, aprovechando la madurez de nuestras posturas ideológicas en el seno de una población alienada e inculta bajo las nacientes condiciones de unidad y articulación de propuestas desarrolladas en el FAD y en el seno de la izquierda panameña.
Debemos tener la capacidad de intensificar las acciones en el movimiento estudiantil para construir conciencia clasista juvenil e impedir que nuestra juventud, naturalmente curiosa y crítica, sea absorbida por la propaganda clientelista pro-partidocracia iniciando un nuevo gobierno neoliberal panameñista. Debemos defender la ética, los valores, nuestros principios, la paz y construir sobre ideas, como la partidocracia y sus seguidores no lo han sabido hacer.
El Frente Estudiantil Revolucionario 29 de Noviembre FER-29 continuara con sus acciones de lucha a favor de los intereses de los pobres y más humildes de nuestro país, y junto al movimiento popular, no permitiremos que la juventud sea usada como borregos para legitimar a explotadores y a la politiquería corrupta de siempre, que luego de llegar al poder solo se refieren a los jóvenes en términos de estadística y solos nos ven como consumidores de fiestas, guaro y carnavales. La juventud somos mucho más que eso. Y el FER-29 NI SE RINDE NI SE VENDE!!
