Ni lo son para su partido y
menos a la partidocracia podrida; al pueblo le preocupa el alto costo de la
vida, la inseguridad, la falta de un real transporte público después del
fracaso del Metrobus; al tirano solo le preocupa el control de la Corte Suprema
de Justicia, el control sobre la Asamblea Nacional de Diputados, comprar
partidos, diputados, representantes, alcaldes, sobornar funcionarios para que
se inscriban en el CD (cambio dictatorial) para mantenerlos con empleos y así sentirse
fuerte y grande en sus delirios de sueños faraónicos.
La “Alianza” que impusieron
los yankees, ahora se convence de su mentira y hoy vemos los
resultados que eran de esperarse. Si ellos como aliados no se respetan ¿Cómo esperar
que respeten los intereses del pueblo? Hoy el pueblo ha visto una vez mas que
fue engañado y utilizado con un show de falsa democracia y discursos
populistas, que usan la ultraderecha para llegar al poder con el voto popular y
de ahí hacer lo que sus intereses personales dictan: ejecutar sus proyectos personales
y partidarios que nada tiene que ver con los intereses de los más pobres.
El pueblo panameño debe
entender sin duda el carácter dictatorial, tirano, fascista, totalitario y
antipopular del gobierno que preside Ricardo Martinelli y señalar que Panamá
hoy vive una DICTADURA CIVIL. Al movimiento popular y revolucionario le toca la
ardua tarea de la organización popular de las comunidades, barriadas, centros
de trabajo, salones de clase y enfrentar la clase política dominante burguesa y
salir a defender en las calles los intereses de los estudiantes, campesinos e indígenas.
Como lo hemos denunciado
desde el primer día de vejámenes contra la población, nuestros días de aparente democracia en esta crisis
interburguesa se ven amenazados por la politiquería, la partidocracia y las
ambiciones del presidente burgués al mejor estilo de las tiranías y dictaduras
que han azotado a los países en Latinoamérica.
El movimiento estudiantil
revolucionario y progresista, en sus banderas o en unidad, debe discutir
seriamente como enfrentar la dictadura civil y no las peculiaridades de la
crisis nacional burguesa y de sus respectivos partidos, para defender en
conjunto los intereses más sagrados del pueblo y no permitir mas dictaduras, ni
civiles ni militares. Hoy Martinelli nos hace recordar los oscuros días del Torrijismo
y el Noriegato.
Los panameños no podemos
seguir creyendo en partidos tradicionales; en la politiquería de siempre de
ofertas baratas y de engaños. Es inminente la necesidad de construir y
participar en una alternativa frente a los futuros eventos electorales, donde
realmente se represente nuestros intereses como clase trabajadora productiva,
como proletariado, y disputarle las riendas del estado a quienes ultrajan y mancillan
al pueblo para conquistar definitivamente los más urgentes intereses del pueblo
y sacar el oportunismo y la prostitución política y generar una nueva clase y
cultura de hacer política.
La semilla está sembrada en
la Nueva Esperanza, el Frente Amplio por la Democracia, porque otro Panamá es posible,
una Patria para Todos.
¡A ESTUDIAR A LUCHAR!
¡POR LA PATRIA Y LA REVOLUCION!
¡ABAJO LOS PARTIDOS POLITIQUEROS
¡VIVA EL FAD!
FRENTE ESTUDIANTIL REVOLUCIONARIO 29 DE NOVIEMBRE
FER 29 - FUAR - MEIC - MER - MERP - UEA
1 de Septiembre, 2011
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