El día 12 de febrero del presente año, en lo que se denominara en la hermana República Bolivariana de Venezuela el Día de la Juventud Bicentenaria en alusión a los 200 años de la Batalla de la Victoria, el pueblo venezolano fue escenario de fuertes protestas estudiantiles, orquestadas por intereses aviesos y políticos de carácter fascista, en la cual una legitima protesta juvenil en rechazo de la grave situación económica provocada por el terrorismo económico contra el pueblo venezolano, fue convertida en violentos y vandálicos actos en perjuicio de las mayorías y contra el Estado Social de Derecho legítimamente constituido por las fuerzas organizadas del Poder Popular bajo el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Los actos en celebración de la Juventud Bicentenaria, ejemplo del llamado a la paz y a la convivencia pacífica entre los ciudadanos venezolanos, fue interrumpida por oscuros intereses políticos que manipulan la conciencia de los jóvenes rebeldes universitarios para enfilarlos y utilizarlos como carne de cañón contra el mismo pueblo.
Están son expresiones de una derecha política (venezolana e INTERNACIONAL) fracasada y desesperada, que ante su carencia de legitimidad y credibilidad ante el electorado venezolano, ha tenido que recurrir a manifestaciones violentas y a infructuosos intentos de GOLPE DE ESTADO en contra de un gobierno democráticamente electo, para regurgitar su odio visceral contra toda forma de pensamiento crítico y organización social que ha llevado a una nación a conquistar su plena independencia y autodeterminación.
Vemos con suma preocupación como jóvenes panameños, la complicidad manifiesta de los medios de comunicación locales (televisivos, escritos, ciertos periodistas, etc.) para tergiversar la situación de conflicto en Venezuela y manipular la opinión pública para hacer ver un evidente golpe de estado, violento y fascista, como una expresión “de lucha social” en contra del “régimen” de Nicolás Maduro.
Redes sociales de diversos medios panameños y sus respectivos corresponsales, hicieron alarde del periodismo rastrero y servil, poco objetivo y serio, que en lugar de caracterizarse por llevar a cabo un proceso investigativo e informativo de forma imparcial, se plegaron a defender y “justificar” las acciones golpistas de grupos opositores venezolanos, ignorando de forma lamentosa los cuantiosos daños, heridos, muertos (dos de ellos luchadores sociales revolucionarios) y desaparecidos a manos de estos mismos grupos golpistas y de derecha.
Las denominadas “guarimbas” (protestas violentas en el vulgo venezolano) habían sido previamente articuladas por sectores derechistas y antidemocráticos aglutinados en la Mesa de Unida Democrática MUD, expresión de extrema derecha, reaccionaria y retrograda de la política venezolana, causante de cuantiosos daños y múltiples heridos en diversas marchas y acciones convocadas por ellos cuando pierden procesos electorales como resultado de su incapacidad política y sus nexos con la narco-política.
A nivel internacional, el golpe de estado contra el pueblo venezolano fue manipulado por agencias noticiosas vinculadas a los Estados Unidos a fin de crear un marco de opinión antichavista, apoyando abiertamente el intento de golpe de estado. Dichas agencias “noticiosas” sirvieron de “fuente” para algunos medios regionales y multiplicar por las redes sociales los hechos vandálicos y violentos contra la población; es decir, el típico terrorismo mediático de la censura y la manipulación para acomodar los acontecimientos políticos a sus nefastos intereses.
Estamos hablando de la misma receta mediática utilizada contra países como Libia, Egipto, Ucrania, Grecia, Siria y otros que luego han sido sangrientamente invadidos “en defensa de la paz y la libertad”.
De igual forma, nos preocupa el “lobby” político de la derecha venezolana asentada en Panamá y su fuerte presencia antichavista, principalmente concentrada en universidades privadas como la USMA, la Universidad Latina y la ULACIT que contaminan la conciencia de los jóvenes panameños, trayendo a nuestro suelo un conflicto complejo en la agudización de lucha de clases en Venezuela, aprovechándose de la alienación mediática nacional evidenciada en la poca madurez y cultura política de nuestros panameños respecto a nuestros propios males sociales: una dictadura civil neoliberal, capitalista y autoritaria.
El saldo de estas protestas golpistas, ha sido la muerte de 3 personas, 66 heridos de gravedad (nueve se registraron en Caracas, 41 en Aragua (centro - norte), 11 en Mérida (oeste) y 1 en Táchira (oeste), de las cuales 17 son funcionarios militares o policiales y 49 son civiles), casas, propiedades y 7 patrullas incendiadas, vandalismo a instituciones públicas como el Ministerio Publico y la sede del Canal VTV en Caracas y 4 desaparecidos, además de la confirmación de grupos nazi-fascistas infiltradas en dichas manifestaciones “pacificas”.
Como juventud panameña organizada, expresión revolucionaria del Movimiento Estudiantil, rechazamos CONTUNDENTEMENTE las acciones golpistas de opositores y grupos de derecha, tratando de derrocar el gobierno popular de Nicolás Maduro, el Partido Socialista Unido de Venezuela PSUV y las fuerzas progresistas aglutinadas en el Gran Polo Patriótico. Repudiamos las cínicas mentiras de la prensa burguesa en su ya conocido plan de desinformación masiva en contra de la democracia popular de Venezuela.
Nuestra solidaridad con el bravo pueblo venezolano que defiende su democracia del fascismo y aboga por la libertad y la paz, constantemente amenazados por los planes desestabilizadores orquestados desde Washington para hacer sufrir la economía y la paz de un pueblo y entregarlo dominado y manipulado a las garras de la antipatria y los lacayos del imperialismo.
Frente Estudiantil Revolucionario 29 de Noviembre
FER-29 Panamá
Juventud FRENADESO
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